Visión del sector Fintech & Insurtech 2022/23

Eloi Noya dirige la consultoría financiera para empresas Altria Corpo y es Director de Innovación en el Instituto de Estudios Financieros (IEF) en Barcelona. Es profesor en el IEF, en Esade Business School y en la Barcelona Technology School, en materias de fintech, financiación alternativa, banca digital, entrepreneurial finance y blockchain financiero. Es asesor de diversas startup fintech, consultor de blockchain y mentor senior en diversas ediciones de Bankia/Caixabank Fintech by Innsomnia. Autor del libro “Fintech. Ahorro e inversión en la era financiera digital”. Ha sido emprendedor en fintech, cofundando LoanBook Capital, que fue líder en el sector del marketplace lending en España, y anteriormente fue directivo en Catalunya Caixa en áreas de banca de empresas, negocio internacional y marketing. Es licenciado en ADE por Esade y en Derecho por la UOC, y Executive Máster en Digital Business por Esade, además de haber obtenido certificaciones EFA y CEFA de asesor y analista financiero.

A pesar de las difíciles circunstancias macroeconómicas que arrastramos a raíz de la pandemia y de la desgraciada situación que vivimos con el conflicto bélico de Ucrania, el sector del Fintech & Insurtech, y en general la innovación en las finanzas a nivel mundial, están viviendo tiempos de una gran actividad y una velocidad de cambio a veces difícil de asimilar incluso para los que estamos más atentos a las noticias de la industria. El año 2021 tuvo una actividad inversora en el sector del Fintech como no se había visto hasta la fecha, con 121 mil millones de dólares de inversión en Fintech por parte del capital riesgo, más que la suma de los dos años anteriores, y para este 2022, aunque se espera algo de enfriamiento en esta tendencia alcista, los movimientos inversores continúan estando presentes, reflejando el interés estratégico que el Fintech tiene ahora mismo.

Vamos a hacer en este artículo un breve repaso sobre la situación actual y algunas de las tendencias que protagonizarán estos próximos dos años en el sector Fintech & Insurtech.

Situación actual

En estos últimos años hemos constatado la irrupción de los neobancos y challenger banks (Revolut, N26, y en España casos com BNext) junto a bancos puramente digitales (en España, OpenBank, Orange Bank o MyInvestor, por citar algunos) como actores que están adquiriendo cuota de mercado de los usuarios más jóvenes, y con una estrategia de arquitectura abierta u Open Banking que favorece su despliegue frente al legado tecnológico de la banca tradicional.

Sin embargo, también es notable el esfuerzo de los bancos incumbentes para transformarse en todos sus procesos, digitalizarse internamente y en su relación con el cliente, y emprender el retador camino de la banca abierta, con el despliegue de APIs que permitan a terceros conectar con el banco.

Junto a los neobancos y los bancos tradicionales, también las empresas de pagos, como Visa, Mastercard, o las Fintech Stripe o Klarna, compiten por desarrollar alrededor suyo productos y servicios financieros, en una lucha por estar en el centro del ecosistema. También las grandes tecnológicas, como Apple adquiriendo recientemente la empresa Credit Kudos que facilita la banca abierta, están en esta lucha por captar a los clientes y ofrecerles servicios financieros.

En el sector del ahorro e inversión más innovador, el llamado wealthtech, parece clara la consolidación de los gestores automatizados de inversión o roboadvisors en los principales países y también en España, y el uso mayoritario de la inteligencia artificial en muchos aspectos de la cadena de valor.

Por lo que respecta a la tecnología blockchain, cabe destacar que en estos últimos años el enfoque que había en los bancos hacia esta tecnología para eficientar procesos e integrar cadenas de valor complejas, sin haberlas abandonado, se ha visto superado con la irrupción del fenómeno de las finanzas descentralizadas (DeFi) que, claramente desde fuera del sistema financiero tradicional, ha aumentado sus volúmenes transaccionados, el número de proyectos y protocolos que existen y obviamente la especulación de precios que sigue a estos cambios de paradigma.

Es evidente que uno de los hot topics en estos últimos años han sido los criptoactivos en todas sus vertientes (bitcoin, criptomonedas, NFTs, etc). Del total rechazo de los bancos hace cinco años se ha pasado a considerar seriamente la incorporación de estos nuevos activos digitales a su cartera de productos. También proyectos como los de Meta, con el intento de crear una nueva moneda digital, Diem, ha catalizado el debate y seguramente ha acelerado los proyectos de monedas digitales de bancos centrales o CBDC.

Tendencias Fintech & Insurtech

En cuanto a tendencias que podemos prever para estos próximos dos años, y sin ser exhaustivos, podemos apuntar las siguientes:

• En el ámbito de la financiación, el Fintech deberá protagonizar un paso adelante ante la previsible restricción crediticia bancaria. Desde la consultoría Altria Corpo vemos cómo, a las ya clásicas Fintech como October, Novicap, MyTripleA o Stockcrowd, van apareciendo fondos de financiación alternativa que combinan tecnología con modelos innovadores, como son los casos de Ritmo o Uncapped, que financian a startups de comercio electrónico y modelos SaaS.

• Va a ser sin duda el momento del Insurtech. El sector asegurador se está preparando para una digitalización total de sus procesos, de su relación con los clientes, pero también de un cambio radical en su modelo de negocio impulsado por tecnologías como el Internet de la Cosas y la inteligencia artificial. Estoy viendo una auténtica revolución en España con startups como Vitaance o Coverfy, y transformaciones muy notables en las aseguradoras clásicas como Zurich, Mapfre, Santalucía o Sanitas, por poner algunos ejemplos.

• Continuará la inversión y desarrollo en las llamadas finanzas integradas (en inglés, embedded finance), esto es, la integración de transacciones financieras en cualquier ámbito de nuestra vida digital, sin que debamos realizar prácticamente ninguna acción adicional. No deberemos ir a ninguna aplicación financiera para hacer un pago, solicitar una financiación o realizar una inversión, sino que en el comercio digital donde estemos comprando ya existirán estas funcionalidades. La banca por tanto se volverá cada vez más “invisible”.

• Las finanzas descentralizadas (DeFi) deberán continuar desarrollándose y el reto es poderlas hacer accesibles a cada vez más personas, simplificando su acceso y con la entrada de bancos y sector financiero tradicional que puedan dar mayor seguridad y confianza. Productos más simplificados y el uso de monedas estables o stablecoins que reduzcan el riesgo de volatilidad de precios, además del desarrollo de aplicaciones user-friendly, pueden facilitar esta adopción. Las palabras de Jamie Dimon, CEO de JPMorgan, en su última carta a los accionistas, reconociendo que blockchain y las finanzas descentralizadas son reales y que están trabajando para adoptarlas, parece marcar la pauta de lo que vendrá en otras entidades financieras. 

• El llamado metaverso, un concepto que ha irrumpido en los últimos meses, será la evolución de Internet e irá más allá de ofrecer entornos de realidad virtual, sino que proveerá de todo aquello necesario para realizar negocios en un entorno puramente digital, incluida la capacidad de crear y transmitir valor. Alrededor del metaverso veremos en estos próximos meses muchas propuestas tanto desde el ámbito de grandes empresas tradicionales que quieren aumentar así su relación con los clientes y rentabilizar esa relación, como desde iniciativas descentralizadas como Decentraland o Sandbox. En todas ellas el uso de blockchain y de tokens para crear y transmitir valor parece que será necesario. El metaverso en su plena capacidad necesitará de fuertes inversiones en tecnología para poder desplegarse, pero se calcula que podría mover entre 8 y 13 billones (europeos) de dólares en 2030, según el gigante financiero Citi.

• La tokenización de activos va a seguir avanzado y podría despegar definitivamente en estos dos próximos años. La posibilidad de financiar proyectos y activos de todo tipo va a dar lugar a mercados financieros nuevos de billones de dólares: el mercado inmobiliario, el mercado del arte, el mercador de empresas sin cotizar, o el mercado de deuda, pueden aumentar su liquidez y ser asequibles a cualquier inversor, transformándolos profundamente. En España ya empezamos a tener experiencias interesantes en el ámbito inmobiliario con proyectos como RealFund, Reental o Brikken, o la constitución del fondo Belobaba de gestión de criptoactivos, y sin duda va a ir a más con proyectos que se están gestando ahora mismo.

• Los tokens no fungibles o NFT, que en estos últimos dos años han irrumpido en su vertiente de arte digital y coleccionables, van a ampliar su espectro y empezarán a tener un papel clave en el desarrollo de modelos de negocio tanto en el metaverso como fuera de él. Los casos de uso empezarán a proliferar y, quizás no en 2023 pero poco después, veremos con naturalidad como tenemos certificados de todo tipo (académicos, sanitarios, de habilidades, etc) o tokens de arte, deportes y otros ámbitos guardados en forma de NFT en nuestra billetera virtual. Estoy viendo mucho interés entre empresas del sector deporte, moda o comunicación en desarrollar NFTs como línea estratégica de ingresos.

• Las monedas digitales de los bancos centrales, conocidas por sus siglas en inglés, CBDC (Central Bank Digital Currencies), son proyectos que han registrado avances significativos en los últimos meses y de los que veremos novedades relevantes en estos próximos dos años. Las CBDC surgen como reacción, pero también gracias al tremendo desafío e innovación introducidos por Bitcoin en particular y por la tecnología blockchain en general. Sin duda, estamos escribiendo un capítulo muy importante en la ya larga historia del dinero, con una confrontación entre las CBDC, por naturaleza centralizadas y de control de la autoridad monetaria, y Bitcoin, la solución sin autoridad central.

Conclusión sobre el sector Fintech & Insurtech

Vemos por tanto que el despliegue de tecnologías y digitalización ya cubre todos los ámbitos de la cadena de valor financiera y aseguradora. Ya no estamos hablando de nuevos entrantes como las fintechs que intentan disrumpir en la industria financiera sino de toda una transformación del sector, que ha adoptado estas tecnologías (Inteligencia Artificial, APIs, computación en la nube, Big Data, Blockchain, Internet de las Cosas…) de forma decidida, y que bancos y fintechs están colaborando entre si, complementándose en sus capacidades y puntos fuertes. Una de las tendencias clave es por tanto esta creciente colaboración entre el sector innovador y tecnológico de las Fintech y el sector financiero y asegurador incumbente.

La otra tendencia es la emergencia de modelos de negocio totalmente disruptivos a los que todos los actores del sector deberían prestar atención para aprovechar las oportunidades que se presentan y para adaptarse o incluso liderar estos nuevos ámbitos. Estamos hablando de las finanzas descentralizadas, de la industria de criptoactivos, o de las posibilidades que da el paradigma del metaverso, y en el ámbito específico del insurtech, el cambio radical de paradigma que el IoT o Internet de las Cosas está provocando.

Sin duda, seguir innovando y explorando en estas áreas emergentes puede ser una fuente de ventaja competitiva e iniciativas como el The Global Fintech & Insurtech Challenge que impulsa Innsomnia van en esta línea.

Autor: Eloi Noya, abril 2022